martes, 21 de diciembre de 2021

descubierto un nuevo palacio chimú en la costa peruana

Imitando a las residencias reales de la ciudadela de Chan Chan, el palacio incluye tres edificios rodeados por un muro rectangular.

Foto: UNMSM

surgida hacia el año 900, la cultura chimú fue una de las más importantes del Perú precolombino hasta que los incas les conquistaron en 1470. Precisamente, este nuevo hallazgo arroja luz sobre el sistema de control agrario de los habitantes de la zona hace cientos de años.

El asentamiento ha sido encontrado por el equipo de arqueólogos liderados por Henry Tantaleán en la Quebrada del oso, una región del el valle del río Chicama en la que abundan los restos chimú. La excavación empezó con un escaneado con georadar del terreno, tras lo que se procedió a eliminar las capas superficiales de rocas y sedimentos para desenterrar las distintas estructuras. Estas forman un conjunto de tres edificios rodeados por un muro dos metros de altura, distribución que recuerda los palacios de la ciudadela de Chan Chan, y que según los investigadores sería la residencia del Curaca o gobernador local.

Al mismo tiempo y a partir del análisis de los restos encontrados, los arqueólogos han determinado que el recinto fue ocupado hace 500 o 600 años, por lo que dataría del final del imperio chimú y habría sido abandonado con la conquista inca.

Un grupo de arqueólogos elimina el sedimento más superficial con un pincel para no dañar los muros del yacimiento.

Foto: UNMSM

Henry Tantaleán y su equipo.

Foto: UNMSM

CULTIVAR EN EL DESIERTO

Al mismo tiempo la función de centro agrícola ha quedado demostrada por las más de 40 hectáreas de antiguos cultivos que rodean el palacio que, a causa de la naturaleza semidesértica del terreno, eran regados por una avanzada red de canales que se alimentaban del río Chicama.

Los arqueólogos esperan desenterrar del todo el palacio en las campañas futuras.

Foto: UNMSM

Para poder datar las fases de ocupación del yacimiento los investigadores hicieron algunos agujeros de sondeo con los que obtener cerámica y otros indicadores temporales.

 

Foto: UNMSM

Así, para la arqueóloga Carito Tavera Medina el yacimiento “demuestra la larga tradición que tiene el valle Chicama, de destinar espacios de cultivo y producción agrícola a gran escala para la sostenibilidad del ser humano en esta área del norte peruano”. Mediante este cuidadoso control de sus escasos recursos los chimún primero y luego los incas consiguieron traer la vida a una zona árida y sin apenas precipitación.

Ahora que se han definido los límites del palacio empezará la excavación intensiva de cada uno de los edificios, que mantendrá ocupados a los arqueólogos de la UNMSM en los años venideros y sin duda desvelará nuevos y apasionantes descubrimientos. 

No hay comentarios: