Las ideas y
conclusiones que propone la dianética o cienciologia son incompatibles con la
visión cristiana de Dios, la Historia y el hombre que propugna el cristianismo.
Según la Iglesia cienciológica, el hombre puede lograr cualquier cosa con la
ayuda de la Auditación, dejando de lado la ayuda y gracia y la providencia
divina. Para la cienciología el sentido trascendente de la persona no existe,
no deja de ser un residuo enegrama. Antropológicamente también hay poca
conexión al considerar al hombre como un ser ilimitado con una salvación que
depende de sí mismo y de los demás como parte práctica de su salvación. A parte
de creer en la reencarnación, no toman en cuenta la obra redentora de
Jesucristo ni la resurrección, tampoco la relación con Dios. Sólo coinciden en
la designación de Iglesia como comunidad de creyentes, aunque en su caso es una
organización claramente empresarial (con caros cursos y seminarios de formación
y ascensión en el conocimiento).
Entre los elementos que la hacen incompatible con la fe
católica se encuentran las creencias en la reencarnación de las almas y que el
dios en el que creen no influye ni en la vida de los hombres ni en la historia
de los pueblos. Por lo tanto, no tienen ningún compromiso humano moral, porque
como el dios en el que creen no interviene ni en la vida ni en la historia y
esto les permite poder tener el código moral que ellos establezcan y les
interese.
Una lectura por la literatura
de la cienciología nos muestra que está llena de contradicciones acerca de
Jesucristo. Su perspectiva de relaciones públicas con respecto a Jesucristo que
se encuentra en el libro promocional ¿Qué es Cienciología?,
podemos leer en el capítulo 2 "El
patrimonio religioso de la cienciología", después de las secciones
sobre los primeros ritos religiosos y sobre los budistas, se lee que Jesús de
Nazaret "trajo nueva esperanza al hombre al predicar que la vida no es
lo único que el hombre puede esperar". Luego se muestra un hombre en
la cruz con la leyenda: "Aunque fue crucificado, la esperanza que
Cristo trajo al hombre no murió. En lugar de ello, su muerte se convirtió en un
símbolo del triunfo del espíritu sobre el cuerpo material y así trajo nueva
conciencia de la verdadera naturaleza del hombre". Para un cienciólogo, Jesucristo fue solo un hombre agradable, quien
desafortunadamente fue muerto injustamente, y cuya historia termina con su
muerte.
El texto de la cienciología es una enseñanza de la Nueva
Era, que reduce a Jesús a un mero símbolo y elimina completamente la verdad
acerca de su persona divina, así como el significado de su muerte, sepultura y
resurrección, donde yace la verdadera esperanza del hombre. Jesucristo murió en
la cruz por los pecados de la humanidad, para reconciliar al hombre con Dios,
como Salvador de la raza humana y único camino hacia el Padre.
Enseñanzas más "avanzadas" sobre Cristo (en los
materiales del curso de nivel VIII de cienciología y en un artículo de la
revista Certainty Magazine), muestran a Jesús como un "producto
de la imaginación" y lo reducen a "sólo una sombra"
en los niveles de conciencia espiritual de la cienciología, unos ocho niveles
debajo del máximo estado que pueden alcanzar, el de Thetan Operativo VIII (OT
VIII, por sus siglas en inglés). En el nivel OT VIII se les pide abandonar su
creencia en Jesucristo porque es un "producto de la imaginación",
un implante que es necesario borrar de la mente para proceder en el camino
espiritual hacia la inmortalidad.
Aunque los cienciólogos asegurarán que la Cienciología es
compatible con el Cristianismo, la Biblia se contrapone a todos y cada uno de
los puntos de las creencias que ellos sostienen lo que hace que el diálogo sea
prácticamente iposible: Dios es soberano y el único creador del universo
(Génesis 1:1); la raza humana fue creada por Dios (Génesis 1:27); la única
salvación posible para el hombre es por medio de la gracia, y a través de la fe
en la obra terminada de Jesucristo (Filipenses 2:8); la salvación es un regalo
gratis por el que la raza humana no hizo nada para merecerla (Efesios 2:8-9). La Iglesia de la Cienciología Internacional no tiene una definición
clara de la naturaleza o persona de Dios. Las referencias a un ser supremo son
raras en la literatura de la cienciología, donde se le llama el "ocho
dinámico" o la "infinidad". El ser supremo se define con términos
vagos y panteístas, como abrazar la "totalidad de todo", por contra
para los Catlólicos Dios es el Creador eterno, infinito y personal del universo
(Gn. 1; Dt. 6:4). Él es espíritu (Nm. 23:19; Jn 4:24) y ha existido desde la
eternidad en forma de trino: Padre, Hijo y Espíritu Santo (Mt. 28:19; 1 Cor.
12:4-6).
Como final de
la poca conexión entre el cristianismo y la cienciología, hay que considerar
que la ciencióloga afirmaba confiadamente que Jesús murió en la cruz porque los
judíos no pudieron aceptar sus enseñanzas budistas. En sus cursos explica cómo
Jesús había estudiado en China y se había convertido en un monje budista antes
de su ministerio en Palestina, y que la visión tradicional de lo que enseñó
Jesús y por qué murió era sólo una opinión como han afirmado algunos ex-adeptos.
Finalmente L. Ron Hubbard y la Iglesia de la Cienciología sostiene que los
pecados de una persona sólo pueden ser perdonados si la persona paga para pasar
por el proceso de auditoría ofrecido por la Iglesia y termina convirtiéndose en
un Thetan Operativo, eliminando de un plumazo la salvación para todos y
gratuita.
Nacho Padró
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