Si Tu eres el camino
la verdad y la vida,
¿no será desatino
desviar y seguir senda prohibida?
¡Oh ciego desvario
que dejas las verdades
y corres como un río
a la mar de las vanas vanidades.
No saciarás en ellas
la sed que te devora,
que son mentiras bellas,
bellas, mentiras que tu mente dora.
Y cruzarás los mares
y ganarás la tierra,
en tales avatares
no encontrarás La Paz sino la guerra.
En tanta desventura
y tanto desconcierto,
¿dónde hallar la segura
senda escondida del seguro puerto?
Mi nada me anonada
si Ti todo es vacío,
sin Ti no tengo nada,
contigo, mi Señor, el cielo es mio.
Mariano Sedano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario