lunes, 23 de julio de 2012

Los presupuestos teológicos fundamentales del documento “El cristianismo y las religiones” Por la Comisión Teológica Internacional (1997)


·        La iniciativa del Padre en la salvación: El Dios que quiere salvar a todos los hombres es el Padre de nuestro Señor Jesucristo. El designio divino de la salvación precede la creación del mundo, y se cumple con el envío de Cristo al mundo. La voluntad salvadora de Dios no conoce límites, pero está siempre unida al deseo de que todos los seres humanos puedan reconocer la verdad, es decir, puedan adherir a la fe. El Padre no solo es el iniciador de la obra salvadora sino también el fin a que ella tiende (cf. 1 Cor 15,28).
·        Plenitud y carácter definitivo de la revelación de Jesucristo: Jesús verdadero Dios y verdadero hombre, sus palabras y sus acciones manifiestan en modo total y definitivo la revelación del misterio de Dios, aun cuando la profundidad de tal misterio permanece en si mismo trascendente e inagotable.
·        La  única mediación de Jesús: No se pueden considerar otras posibilidades de «mediación» salvadora aislándolas del Dios y hombre Jesús. Esta única mediación de Jesucristo está unida a la voluntad divina de salvación universal. El término de «mediador» debería ser tomado en su significado específicamente cristiano.
·        La universalidad del Espíritu Santo: La tarea de una teología cristiana de las religiones, guiada por el Espíritu Santo, es la de ampliar la comprensión del misterio de Jesucristo dejando al descubierto las «semillas del Verbo» escondidas en las otras tradiciones religiosas.
·        «Ecclesia, universale salutis sacramentum»: reflexiona el documento sobre el misterio de la Iglesia, subrayando su naturaleza de «sacramento», es decir, de signo y de instrumento de esta salvación que Dios quiere para todos, para la humanidad entera.

Nacho Padró

No hay comentarios: