En el libro “Al acecho del Reino Diferente” de Xavier Alegre
encontramos un estudio-reflexión sobre la Parábola del Sembrador (Mc 4, 3-9). El autor
parte de la base consensuada por los expertos, de la parábola como reflejo de
la predicación de Jesús en el que se refleja el proyecto contracultural del
Reino de Dios. Estas parábolas las considera, siguiendo la estela de otros
especialistas, como un conjunto de relatos sorprendentes que provocan al oyente
invitándolo a pensar y profundizar en una lectura interactiva. Es lo que Dodd
consideraba como una metáfora que Jesús toma del entorno agrícola siendo
atractiva al oyente por su cercanía pero que al no tener una aplicación exacta
crea dudas y provoca reacción, básicamente el elemento sorpresa es lo que las
diferencia de las parábolas típicamente rabínicas de su tiempo.
En la reacción de Marcos hay que tener en cuenta que su teología está enfocada hacia la comunidad sobre la que quiere hacer consciencia de la contraculturalidad del tema del Reino de Dios y hacerla pensar eliminando falsas seguridades o preconcepciones erróneas, es lo que Donahue llama el Shock o impacto que posibilita la nueva visión.
En la reacción de Marcos hay que tener en cuenta que su teología está enfocada hacia la comunidad sobre la que quiere hacer consciencia de la contraculturalidad del tema del Reino de Dios y hacerla pensar eliminando falsas seguridades o preconcepciones erróneas, es lo que Donahue llama el Shock o impacto que posibilita la nueva visión.
Este nuevo punto de vista es lo que implica al oyente no
dejándolo indiferente o neutral invitándolo a cambiar. Mesters lo agrupará en
los métodos parabólicos como dinámicos, con una indicación de la verdad
revelada no es conclusa, nunca deja tranquilo al oyente y obliga a mantener la
tensión y atención en la vida.
En el caso concreto de la Parábola del Sembrador, se
cree que la versión de Marcos es la primitiva aunque no hay acuerdo para saber
en que momento de la vida de Jesús se efectuó. Uno de los problemas que plantea
es sobre quien pivota el centro de la trama: si en el sembrador o en el
terreno.
- En el caso del sembrador se trataría de Jesús, aunque parecería un poco alocado, sin importarle a donde cae la semilla, así invitaría a la toma de conciencia de la universalidad del mensaje y del extraordinario fruto que produce a pesar de ello gracias posiblemente a la confianza del sembrador.
- Otro contraste posible es estudiar ese contraste entre la semilla y el fruto en el que se destaca el dinamismo del Reino simbolizado en la semilla
- La Calidad del terreno como otra punta de la parábola enfocada hacia la iglesia primitiva.
Se trabaja el concepto de seguridad pues hay una cosa clara
en el fruto abundante de la siembra, pase lo que pase. En el momento que el
autor hace la lectura alegórica, este identifica a la semilla con la “palabra”
y centrándose más en la relación del terreno para justificar las causas del
fallo de la siembra:
- Tenemos el terreno fuera del camino con Satanás que se lleva lo sembrado (pájaros).
- Luego viene el terreno pedregoso (alegría en la Palabra pero sin consistencia sólida)
- Pasamos a la zona de arbustos, de los que han escuchado pero las preocupaciones mundanales les ciegan
- Para acabar con los terrenos donde se fructifica.
Si bien podría pensarse que es una parábola para los no
cristianos, Marcos insiste en que es un ejemplo para la iglesia primitiva invitándola
a pensar y perseverar pues, como explica Xavier Alegre, el Reino sigue la
lógica mundo y tampoco es cierto que los discípulos lo entendieran todo a la
primera pues el concepto de Reino sólo se puede hacer comprensible a la luz de la Cruz y la Resurrección (me
remito al texto de la Tumba Vacía
donde los evangelistas en boca del ángel se lo recuerda).
El autor finaliza el texto haciendo una hermenéutica
actualizada donde considera que el sembrador no elige el terreno de forma
lógica desperdiciando muchas siembras y relacionándolo con las situaciones
actuales, donde en conjunto parece como si Dios llamara a todos, siendo en el
fondo los que condicionamos la respuesta (tipos de terrenos)
Ignacio Padró
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