Abel G.M. Periodista especializado en el ámbito de la historia y los viajes.
Actualizado a 29 de noviembre de 2022 · 17:47 · Lectura: 3 min
saqqara, una de las necrópolis más importantes del Egipto faraónico, ha dado recientemente dos nuevas y fabulosas sorpresas. Por una parte los arqueólogos han identificado una nueva pirámide , perteneciente a una reina desconocida hasta ahora, llamada Neith y que vivió durante el Imperio Nuevo. El otro descubrimiento es aún más sorprendente: un complejo de pozos y túneles en cuyo interior se han hallado casi 300 sarcófagos del mismo periodo, con momias, amuletos y papiros.
De la reina Neith poca cosa se sabe, puesto que es la primera vez que su nombre aparece. Sin embargo, por los grabados de la pirámide han deducido que fue una mujer importante, tal vez una Gran Esposa Real o una regente. El complejo de los pozos, en cambio, ha aportado mucha más información gracias a los papiros encontrados: se sitúa cerca de la pirámide de Teti , el primer faraón de la Dinastía VI. El famoso egiptólogo Zahi Hawass, que trabaja en las excavaciones de Saqqara, afirma que “Teti fue adorado como un dios durante el Imperio Nuevo, de modo que la gente quería ser enterrada cerca de él”.
Foto: Cortesía de Zahi Hawass
CASI 300 SARCÓFAGOS DEL IMPERIO NUEVO Los casi 300 sarcófagos destacan por su calidad y excelente estado de conservación, así como por los tesoros que los acompañan: ushebtis (pequeñas figuras que debían actuar como sirvientes del difunto en la otra vida), juegos de mesa como el senet, estatuillas del dios Ptah-Sokar y un hacha de metal encontrada con la momia de un soldado. Entre los sarcófagos, destacan uno de gran tamaño fabricado con piedra caliza y otro con la máscara funeraria de una mujer fabricada con oro puro. Las momias también se encuentran en un estado de conservación asombroso. Una parte de estos hallazgos será expuesta en el Gran Museo Egipcio, cuya apertura está prevista para 2023.
Cada uno de los sarcófagos tiene grabado el nombre del difunto y un rostro individual.
Una característica particular de estos sarcófagos es que cada uno tiene grabado el nombre del difunto y un rostro individual , permitiendo identificar a la momia y también si se trataba de un hombre o una mujer. Están decorados con escenas del Libro de los Muertos y muchos muestran un motivo particular, los llamados “cuatro hijos de Horus”, que protegían los órganos del difunto. Las personas enterradas aquí eran, por lo tanto, gente de alto rango que podía permitirse una sepultura en un lugar de prestigio y un sarcófago personalizado.
Hawass ha destacado la excepcionalidad de este hallazgo , no solo por la importancia y cantidad de las piezas encontradas, sino porque la mayoría de enterramientos descubiertos en Saqqara pertenecen al Imperio Antiguo o al Periodo Tardío, mientras que los del Imperio Nuevo no son comunes en esta zona. Por ello, el arqueólogo está convencido de que Saqqara será uno de los sitios arqueológicos más importantes de Egipto en el futuro inmediato.
No hay comentarios:
Publicar un comentario