Necesitamos juzgar menos.
Necesitamos dejar que los demás sean libres.
Que tomen sus propias decisiones sin tratar de juzgar cada paso.
Sin hablar sin saber.
Necesitamos ser más humildes, más respetuosos, más buenas personas.
Dejar el odio a un lado, apartarlo como podamos, lo más lejos posible.
Dejar de crearle inseguridades, miedos, y dolores de cabeza a los demás.
Tratar de ponernos en el lugar del otro, y no señalar tanto.
Todos llevamos algo a las espaldas, todos estamos pasando por una dura batalla que seguramente poca gente sepa, o nadie.
Todos tenemos días malos, momentos difíciles, y nos afectan las cosas de una manera u otra.
Más, o menos.
Todos somos, al fin y al cabo, personas.
Por eso trata de respetar, de no generar odio, de no atacar a la primera de cambio.
De no buscar siempre lo malo, incluso de donde no lo hay.
¡Porque no! No todo el mundo piensa como tú, ni actúa como tú, ni hace las cosas por lo que tú crees que lo hace.
Creo que ya es hora,
ya nos toca que seamos, simplemente, más humanos.
Solo un poquito.
Estoy seguro que nos irá mejor.
Pedro Lanzagorta
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