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un sacerdote del Gran Santuario de Ise realiza una danza sagrada vestido con el atuendo y la máscara tradicionales, en 1949. El de Ise es el santuario más importante del sintoísmo o shintô, la religión propia de Japón, cuyo nombre significa “el camino de los dioses”. Esta religión se basa en la existencia de infinidad de deidades y espíritus asociados con multitud de cosas: dioses de la creación o la destrucción, animales, aspectos de la naturaleza como los ríos o los montañas, fenómenos naturales, cualidades o virtudes… es, por lo tanto, una religión animista. Acudir a los santuarios sintoístas para pedir el favor de estas deidades, especialmente antes de afrontar un reto importante, es algo muy enraizado en la sociedad japonesa incluso entre aquellos que no se consideran “creyentes”.
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