Ya són más de 50.000 en España (más de 65.000 según la FCBE - Federación de Comunidades Budistas de España), profesores, enfermeras, médicos, dueños de bares... y además són budistas. Practicantes de esta milenaria filosofía oriental, que cada vez tiene más adeptos y que desde el año 2002 está considerada por parte del Estado como religión de "notorio Arraigo".
Con un crecimiento de entre un 5-10% en los últimos 20 años, su crecimiento parece imparable y eso le permite firmar acuerdos con el estado y afianzar su libertad de culto. Aunque en el fondo lo que buscan es un "reconocimiento moral ante la sociedad española".
Practicantes de la meditación Zen, seguidores del Dalai lama, estudiosos de la filosofia oriental budiosta o monges del budismo tibetano... todos englobados dentro de una manera de vivir y sentir que cada vez tiene más atracción en un sociedad estresada y desilusionada con la filosofia occidental.
Nacho Padró