Leo con curiosidad en el PERIODICO de Cataluña una crítica sobre el tratamiento diplomático de Benedicto XVI hacia George W. Bush. La crítica se basa en un paseo por los jardines del vaticano entre los dos, cosa poco común en los tratamientos diplomáticos. Y se pregunta el diario como es que con un impulsor de guerra y con tantos temas opuestos tiene el pontífice un trato tan diferencial.
Bien, leo poco tiempo después un artículo de Francesc Romeu en el FOC NOU nº 409 en el que se hablaba de la visita del Papa a EEUU (abril 2008) y en ella puedo leer toda una serie de atenciones de George Bush hacia el Papa: ir a recibirlo al aeropuerto (poco normal y deferencia clarísima de la mayor potencia mundial al visitante) y una recepción en sus jardines cosa sólo reservada a unos pocos... el dia de su cumpleaños.
Conociendo la fina diplomacia de los nuncios vaticanos (decanos en esto) y del actual pontífice ¿no es más lógico pensar que es una correspondencia a los tratamientos de su anterior visita?.
Recordemos que aunque Bush es Metodista... hay muchos puntos de unión con el pensamiento moral católico: tratamiento de células madre, oposicion al aborto, eutanasia .... Así que como Tony Blair en el final de su mandato pasó al catolicismo... ¿no podrian ser pasos de sintonia para su conversión al catolicismo?.
En fin, ni así podremos saber los motivos y las intenciones... por ello arriesgado parece ser el dar noticia a un paseo por muy importantes que sean las personalidades.
Nacho Padró